¡Queridos lectores!
El otro día visité el Koninklijk Museum voor Schone Kunsten Antwerpen (KMSKA) y tengo que admitir que de lo que llevo visto en Amberes ha sido sin duda lo más impresionante. No solo por el arte que contiene, sino por cómo está cuidado todo hasta el último detalle y la preciosidad del edificio en sí.
La entrada
El museo es enorme y por fuera destaca por su estilo clásico y las columnas gigantes de la fachada principal. De hecho, es por el lateral izquierdo de esta por donde está la entrada. Ahí, se compran los tiquets y se sigue hasta llegar a una sala toda de mármol blanca que me pareció súper bonita por donde se sube al piso principal. Ya en él, está el vestíbulo cuya decoración es digna de un palacio y además hay un piano, por lo que, si tenéis suerte como yo, oiréis a una pianista mientras visitáis.
Las exposiciones
En cuanto a la distribución de las exposiciones, se divide en cuatro niveles (sin contar el de inferior de la entrada). En el primero se encuentran los maestros modernos como James Ensor por ejemplo. En el segundo, los maestros antiguos, entre los que destaca Rubens. El tercero es el de las esculturas. Y en el cuarto vuelven a haber maestros modernos.
Al ser tan grande, en una mañana no me dio tiempo de ver casi nada y como tenía que decidirme, escogí visitar la segunda planta. En concreto, seguí una ruta de la aplicación del museo que os recomiendo mucho, ya que me permitió centrarme en algunas obras y no pasarlo todo rápido y por encima.
Además, una de las cosas que más me gustó del museo es que el arte no solo estaba en las obras. Por ejemplo, me llamó mucho la atención el asiento de abajo que parecía un animal mitológico. O la mano que giraba en el techo de una de las salas. Así mismo, ya que se hace la visita, creo que merece la pena investigar un poco por fuera. Os recomiendo que os deis un paseo por su bonito jardín y que aprovechéis para echarle un vistazo al mosaico más grande de Bélgica.
Los tiquets
Por último, me imagino que algo que interesa es el tema de las entradas. El museo está abierto entre semana hasta las 5 de la tarde, menos el jueves que hasta las 10 de la noche, y el finde hasta las 6. El precio son 16 euros para menores de 26 años, aunque con el Pase de Museos la entrada es gratis.
En conclusión, si estáis por Amberes, no os arrepentiréis de hacer una vista al KMSKA. Además, no está de más pensar que somos unos afortunados porque tan solo lleva un año abierto, ya que estuvo más de diez años cerrado por restauración.
¡Nos vemos pronto!
Mireia Prados
Soy de Sant Joan Despí (un pueblo de las afueras de Barcelona), tengo 20 años y actualmente debería empezar tercero de Publicidad y Relaciones Públicas en la UPF. Y digo debería porque este curso va a ser un poco diferente a los anteriores, ya que voy a hacer un Erasmus en Bélgica. De hecho, por eso decidí presentarme para ser corresponsal, y no tuve ninguna duda en la categoría que quería cubrir
Me considero una persona organizada, trabajadora y creativa a la que le encanta estar con su familia y amigos. Además, también me encantan los animales y viajar. Y aunque ya estuve hace unos años en Bélgica y me enamoré del país cuando visité Gante, Brujas y Bruselas, no tuve la oportunidad de conocer Amberes, que es donde voy a estar viviendo