Señoras y señores, a pesar del frío y la niebla, ayer decidí coger mi Go Pass 10, dirigirme a la estación de tren de Lovaina y plantarme en Brujas en menos de lo que canta un gallo. Me habían hablado tanto de esta ciudad, que no pude resistir otro fin de semana sin visitarla, las habladurías se quedan cortas, créanme, hasta sin sol y con guantes de lana en ambas manos, se sentirán en un cuento de hadas.
He aquí la prueba:
Podría pasarme horas y horas hablándoles de sus preciosas casitas de colores, las tiendas de dulces, de sus magníficas esculturas, los sorprendentes canales con los que se tropezarán allá donde vayan e, incluso, de las iglesias que les dejarán con la boca abierta.
Sin embargo, hoy vengo a hablarles sobre la galería de arte de Salvador Dalí. Dentro de uno de los monumentos más prestigiosos de Brujas, el Belfort, y en la plaza del mercado, Grote Markt, podrán deleitarse de un pedacito de uno de los artistas más conocidos de la historia, Dalí. En esta fantástica exhibición de arte, encontrarán la colección auténtica de sus obras y esculturas mundialmente aclamadas. Los espejos, el oro y el rosado del lugar resulta impactante, al estilo del artista.
La tradición de mostrar las pinturas de Dalí en Brujas comenzó en 1997, cuando se presentó una pequeña colección del artista. Después del éxito y de la acogida de la misma, las autoridades locales decidieron abrir, de manera permanente, un museo dedicado a las obras del pintor. A lo largo de sus diferentes salas, podrán leer varias frases de Dalí: “la modestia no es, precisamente, mi especialidad”.
El museo está abierto durante todo el año. Además, para la visita a las diferentes exposiciones hay disponibles audio-guías, que les ayudarán a adentrarse en el viaje al mundo oscuro y onírico de Salvador Dalí.
Abierto todos los días de 10:00 a 18:00 h.
Precios:
- General: 10 €
- Estudiantes y Mayores de 65 años: 8 euros
- Menores de 12 años y Brugge City Card: Gratis
Señoras y señores, si tienen pensado visitar Brujas, no dejen de acudir a esta maravilla.
