Me encanta salir a pasear las mañanas de los sábados por el centro. Con el mercado y la gente sin tener que trabajar está todo muy animado; familias de compras o paseando, scouts vendiendo bombones… los fines de semana cambia la fisionomía de la ciudad ya que la mayoría de estudiantes belgas se van a casa y es entonces cuando ves a leuvenses disfrutando de su tiempo libre.
Otro motivo por el que me gusta, es porque muchos sábados te encuentras un concierto improvisado en alguna de las calles principales. Esto es por aquí la música tiene gran importancia y tradición. Suele haber conciertos y festivales musicales con asiduidad en la época estival. Cómo además puedes ver en el la música puede de muy diferentes estilos pero siempre encuentra un público agradecido, entusiasta y entregado a esta expresión cultural que tiene como escenario la calle.