Una de las obsesiones al hacer la maleta es cargarla con comida “porsi”. Por si acaso no hay jamón serrano, por si acaso no hay chorizo, por si acaso no hay ¿sangría?… Así que os voy a decir que hay y que no hay en Bruselas. Tengo que deciros que por haber, hay hasta discos de Los Chichos en el Mercado de Midi. ¡Esto es Europa chicos!
Empecemos hablando de lo que sí hay. Hay que recordar que Bruselas es una ciudad donde una gran parte de la población es de fuera de Bélgica. Así que los supermercados están llenos de alimentos italianos, asiáticos y…¿Cómo no? Españoles. Y os aseguro que más baratos que en la sección gourmet de El Corte Inglés. Hay supermercados que tienen zonas expresamente dedicadas a alimentos extranjeros. Y he aquí dónde podéis encontrar hasta banderillas, paté la piara, Colacao (porque aquí lo que impera es Nesquick), horchata Chufi, tomate Solís, y arroz.
En la zona común de charcutería existen cien mil marcas de jamón serrano, chorizo…¡hasta butifarra catalana! Fuet de Casa Tarradellas y Revilla. En la zona de quesos hay quesos asturianos curados que están rebuenos. Por supuesto, gazpacho al valle, gazpacho de marca blanca que aquí lo llaman “gaspacho” y sangría.
Cuando vas a la zona de las frutas y las verduras es cuando te sorprendes porque muchos productos son Españoles. Que si naranjas Valencia late, que si plátanos de Canarias…como en casa vaya.
El problema viene con las cosas que no venden aquí. O las cosas que venden pero tal vez más caras (bastante más) que en España. No venden arroz redondo de forma habitual y es algo muy curioso, si lo venden, está en las zonas de productos importados españoles a unos precios de producto de lujo. Otro producto que aquí no hay es el colorante alimentario, no es que sea de primera necesidad, pero si quieres que tus fideos estén amarillos…va a ser un aprieto.
Tras muchos viajes al supermercado, me he dado cuenta que tomate frito sólo venden de una marca. Es más, hay en supermercados que ni siquiera venden. Ofrecen otro producto pero es tomate “passata” que no es lo mismo. Un día comiendo me fijé en el brick de tomate y ponía que era un producto español. Me quedé alucinando. Es más una compañera de clase que está de Erasmus en Bergen (Noruega) me ha dicho que allí no venden.
En resumidas cuentas: en Bruselas hay prácticamente de todo. Y si no lo encuentras, busca mejor porque lo habrá. Aunque ya que vas a vivir en otro país, lo mejor es que conozcas la cultura desde dentro.
Y empezar por comer lo autóctono es la mejor forma.
A donde fueres haz lo que vieres.