Hoy, después de cinco increíbles meses siendo vuestra Corresponsal Erasmus en Brujas, mi cargo ha llegado a su fin. Han sido cinco meses repletos de aventuras, emociones y nuevos retos. Sin duda, escribir sobre mis descubrimientos y experiencias ha enriquecido muchísimo mi primera experiencia viviendo sola en otro país.
Como os dije en mi primer post, llevaba años soñando con mudarme a Flandes, y me llegué a imaginar esta experiencia de muchas maneras diferentes, pero nunca la imaginé tan intensa y especial como la que he tenido la suerte de vivir.
Han sido cinco meses llenos de paseos en bicicleta, cafés frente al mar, chocolates por el casco antiguo de Brujas, caminadas nocturnas por los canales, martes y miércoles de visitilla exprés a Kortrijk, viernes de compras en Delhaize y domingos de vol-au-vent.
Llegué con las expectativas muy altas, unas expectativas que la realidad ha cuadriplicado. Hoy, ha llegado el momento de partir de mi segundo hogar, con mucha pena, pero valorando mucho más lo que tengo, y teniendo mucho más claro que nunca que volveré, pero de nuevo, para quedarme.
Muchas gracias por leerme, comentarme y enseñarme tantas cosas, sin vosotros no hubiera sido lo mismo.
Nos leemos pronto.
Núria Ventura
Soy Núria, una catalana de veintidós años que lleva esperando su Erasmus en Flandes desde antes de empezar la carrera. Me encanta leer, escribir y hablar. Escuchar también, me encanta aprender cosas nuevas. No podría vivir sin arte. Cuando estoy triste escucho música y cuando estoy feliz también. Amo comer, supongo que el amor por la comida me viene de mi padre. En mi casa, siempre hemos sido de probar platos típicos de otras culturas, y no solo eso, de aprender a cocinarlos también.
Desde los catorce, tuve claro a qué me quería dedicar. Mi sueño era bastante específico: estudiar periodismo en Madrid. Luego, llegó el bachillerato y con ello las clases de economía. Nunca pensé que me fuera a gustar algo así, pero vaya si me gustó… La economía me generaba una curiosidad tan grande, que la puse de primera opción junto con ADE. De esta forma, en 2016, empecé un doble grado en economía y ADE. Descubrí un mundo nuevo, y fui consciente de lo importante que era la economía para ayudar a la gente. Comprendí que los economistas son importantes, pero no para lo que cree la mayoría de la gente. Ellos pueden elaborar modelos para reducir la pobreza, extinguir la corrupción e incluso evitar guerras. A medida que aprendía más cosas, mi amor por la economía crecía. Hoy, la economía me apasiona, de esto no tengo ninguna duda, pero el periodismo aún forma parte de mí.