Los carriles bici se extienden por Amberes como pequeñas arterias. Literalmente puedes saltar de uno a otro y recorrer así kilómetros. El otro día decidí aprovechar el sol para darme un “paseíto” en bici (42 km aproximadamente).
Salí de Rooseveltplatz y traspasé el Borgerhout. De ahí crucé la circular de la ciudad y entré al pueblo de Deurne. Os sorprenderá el tamaño del parque Rivierenhof, siendo probablemente uno de los más grandes de Amberes.
Posteriormente, pasaréis por Wijnegem, dónde podéis hacer una parada en el Shopping Center y tomaros algo o simplemente curiosear las tiendas.
Aunque yo decidí seguir un poco más al norte pasando por los pueblos de Schilde y Sint-Antonius. En el último decidí dar la vuelta para volver a Amberes pero cambiando un poco la ruta. Después de pasar Zandhoven llegue al Canal Alberto (Albertkanaal). Por él se extiende un infinito carril bici suficientemente ancho como para hablar con tus amigos si vas acompañado. Este carril te llevará hasta el norte de Amberes, aunque siempre puedes tomar el carril bici de Wijnegem. Sin duda volveré retomar el carril bici de Albertkanaal y descubriré hasta dónde me lleva.