¿Me creeríais si os digo que existe una sola obra de Miguel Ángel que saliese de Italia antes de que él muriese, y que esa se encuentra en Flandes? Además, esta esconde una historia magnífica que se ve muy influida por el paso de los siglos y los diferentes acontecimientos que se han vivido alrededor de la región flamenca. Hoy os vengo a hablar de la Madonna de Brujas, que se puede visitar en la Iglesia de Nuestra Señora, ¡vamos a ello!
La escultura fue realizada por Miguel Ángel entre los años 1501 y 1504, justo después de regresar de Roma, cuando llevó a cabo una de sus obras más famosas, la Piedad. La imagen que vemos la preside una majestuosa Virgen María, con unas vestimentas que casi cobran vida debido a sus arrugas y pliegues. Agarrándose con ternura a la mano izquierda de su madre, encontramos al niño Jesús, que se sostiene entre las piernas de la Virgen.
Pero, ¿por qué llega a Brujas? Para encontrar la respuesta no tenemos de indagar mucho. Hablamos de comienzos del siglo XVI. Flandes se presentaba ante Europa como una de las regiones más desarrolladas del continente, y, en especial, Brujas se encontraba en una época de apogeo comercial, adquiriendo una riqueza y una importancia muy grande en la época.
Es durante este período cuando una de las familias comerciantes más pudientes de toda la región, los Mouscron, decidió encargarle la obra al escultor italiano, cuyo trabajo ya se conocía en toda Europa. Se trata, pues, de una manera de demostrar poderío por parte de esta familia flamenca. La obra no llegaría a Brujas hasta 1506.
Lejos de permanecer tranquila en Brujas, la escultura tiene una historia de traslados, robos y movimientos muy curiosa. La primera vez que esta obra se sacó de Brujas fue en 1794, cuando, durante la Revolución francesa, el ejército de la Primera República francesa invadió parte de los Países Bajos Austriacos. La imagen fue transportada a París, y no regresaría hasta 1815, cuando Napoleón cae en Waterloo.
El segundo “robo” es quizás el más sonado. Durante la Segunda Guerra Mundial y tras la invasión de Bélgica, la obra fue robada por la Alemania Nazi, junto a otras obras famosas como el retablo del Cordero Místico de Gante, y transportada a una ubicación desconocida. La escultura fue encontrada en una mina de sal en Austria gracias a la labor del Programa de Monumentos, Arte y Archivos de EEUU. La famosa película de 2014 Monuments Men, protagonizada por George Clooney y Matt Damon, se basa en esta historia.
Hablamos de uno de los emblemas más sonados y conocidos del patrimonio flamenco, cuya belleza ha llamado la atención de tanta gente que ha sido siempre uno de los tesoros buscados por los que han intentado invadir Flandes. ¡Y lo mejor es que nosotros lo podemos visitar gratis! Pues la entrada a la iglesia es totalmente gratuita.
¡Nos vamos viendo!
Jose
¡Qué ilusión me hace estar escribiendo por fin estas palabras! A partir de este mes de febrero empiezo como corresponsal de Erasmus en Flandes y tengo muchas ganas de enseñaros mi trabajo. Recoger el testigo de Yolanda en cuanto al tema de Patrimonio es todo un honor.
Antes de nada, me presento. Me llamo José Manuel Ortega y tengo 20 años. Nací en Granada, pero he vivido toda mi vida en La Línea de la Concepción, un pueblo de Cádiz. Estudio Traducción e Interpretación en la Universidad de Granada y, actualmente, estoy realizando un intercambio Erasmus en Bruselas de curso completo.