Si algo me sorprende de este lugar es su dinamismo y movimiento pese a su tamaño relativamente pequeño. Es una ciudad que nunca para quieta, que jamás se detiene, que siempre tiene algo nuevo que ofrecer, algo nuevo que descubrir a tus ojos o, en este caso, a tus oídos.
Aparte de ser estéticamente una ciudad súper romántica, pues para mí es la ciudad del agua y la luz, ya que su alumbrado por la noche es magnífico, y aún más el agua de sus canales que por el día le dan un aspecto bohemio y que por la noche intensifica la iluminación de sus edificios reflejando esa belleza como si fuera un espejo; también lo es por la cantidad inagotable de rincones que ofrecen, noche sí y noche también, música en directo a la luz de las velas, fundamentalmente jazz. Abiertos a todos los públicos y siempre de acceso libre, hay multitud de bares donde bandas muestran sus acordes al público que, cerveza en mano, escucha anonadado y en silencio.
- El lugar más conocido, sin duda, al que ir para una noche de jazz es el Hot Club de Gand, en la Groentenmarkt 15b. Se esconde en una pequeña y estrecha callejuela tras un arco y ofrece música casi todos los días, pero sobre todo los domingos suelen ser los días más populares. Eso sí, hay que ir pronto para coger sitio porque sino se llena. Tiene dos pisos, aunque los conciertos se hacen en la planta de abajo, y también una terraza exterior.
- Otro lugar bastante recomendable, y más desconocido para los turistas o gente no local, aunque igual de masificado, es el bar Damberd, en la Korenmarkt 19. Este sitio está muy bien, es estrechito pero tiene dos plantas y, en la de arriba, cerrada con cristales, se puede fumar mientras se ve el concierto desde un lugar privilegiado y con más espacio libre debido a los que no soportan el humo del tabaco.
- Otra buena opción es el bar Trefpunt donde cada lunes hacen conciertos gratis, así como también otros días de la semana, pero ocurre lo mismo que con los anteriores, como no vayas pronto o no podrás entrar, o si lo consigues estarás bien apretadito dentro, así que hay que ir con tiempo. Este bar se encuentra en Sint-Jacobs 18.
- Uno de los grandes, para mí, es el Hotsy Totsy, en la Hoogstraat 1. Es un bar con las paredes repletas de obras de artistas y exhibiciones de fotógrafos, entre otros. También suelen hacer muchos conciertos gratis, y el buen ambiente es destacable.
- Uno del que no se habla mucho y que descubrí hace poco es In den Hemel, en Muinkkaai 120. Es un pequeño bar al que acudí porque había un concierto de swing y la verdad es que la decoración me encantó, y al no ser tan conocido no había tanta gente y se estaba mucho más cómodo. Hacen conciertos de forma regular.
- De Kleine Kunst en Lousbergkaai 99 también es una excelente opción. Cada lunes por la noche ofrecen una buena sesión de jazz, aunque también organizan otros eventos. ¡Todo es mirarse la web!
- Y para otros estilos de música menos retro o simplemente diferente, encontramos la Muzikantenhuis, es decir, la Casa de la Música. Ahí encontramos bandas de todos los estilos y nacionalidades, así como también ofrecen teatro, danza y otras artes visuales. Sólo debéis comprobar el programa para ver lo que hacen cada mes. Se encuentra en la Dampoortstraat 52.
- Otro lugar que me gusta mucho a mí es el bar Video, en la plaza Oude Beestenmarkt 7. Semanalmente organizan conciertos trayendo bandas de todas partes del mundo de estilos más contemporáneos, sobre todo rock. Inmerso en luces rojas y cintas de vídeo en las paredes, lo recomiendo totalmente a los que les guste descubrir siempre nuevos talentos.
- Y por último también tenemos dos salas tipo discoteca sumamente conocidas por todo habitante de Gante, Charlatan y Kynky Star, en pleno centro en la Vlasmarkt 6 y 9, respectivamente. Aparte de ser lugares de fiesta por primacía, también organizan conciertos de vez en cuando de estilos más actuales, como rock o rap, además de grandes sesiones de DJ.
¿Sabías que…?
En 2009 la ciudad de Gante fue reconocida como “Ciudad Creativa de la Música” por la UNESCO, un título que sólo otras 3 ciudades del mundo tienen el privilegio de haber conseguido (Bolonia, Sevilla y Glasgow).
Soy Cristina López, estudiante de último año de psicología en Barcelona y ahora corresponsal de Gante, mi ciudad destino de Erasmus. ¿Mis primeras impresiones de Gante?
Han habido muchísimas cosas aquí que me han llamado la atención, como que en ocasiones un agua te salga más cara que una cerveza, que en las terrazas de algunos restaurantes te pongan mantas por si hace frío, que en todos los lavabos haya papel (incluso en los lavabos portátiles que ponen en los festivales), que a veces tengas que pagar para ir, que duerman con almohadas cuadradas, que sólo se den un beso en la mejilla al saludarse, o su predilección por el picante, ya sea poniéndose pimienta en la sopa o tabasco en los spaghetti.
Gante es una ciudad que combina tradición y progreso. Hoy en día es considerada una ciudad de estudiantes, hay alrededor de 45000, así que eso significa que, además de su belleza y su aire medieval con multitud de construcciones y calles que visitar y recorrer, es una ciudad joven y activa, constantemente en movimiento. Siempre encuentras algo que hacer, algún evento, festival o exposición que te pueda ser de interés.
A lo largo de mi actividad en este blog os iré mostrando todo lo interesante y curioso que viva durante mi estancia Erasmus, de momento espero que esta pequeña introducción os haya picado la curiosidad para seguir visitándonos y, quién sabe, ¡quizás veniros! Así que por si eso sucede, mi primer consejo es que os alquiléis una bicicleta, no es una ciudad muy grande y se puede recorrer a pie fácilmente, ¡pero no hay nada mejor que sentirse un auténtico belga! Y mi primera advertencia si vais en bici es que tengáis mucho cuidado con las vías del tranvía, ¡y más si llueve!
