Todos tenemos sueños: Algunos sueñan con escribir su propio libro, ir al estreno de su película favorita o viajar a una ciudad concreta que le robó el corazón. Mi sueño siempre ha sido ver a Paul McCartney en concierto y en el final de mi Erasmus lo conseguí.
Dado a la perfecta ubicación de Bélgica en mitad de Europa, era normal que el cantante se pasara por aquí: Los distintos artistas que han pasado por los estadios belgas este año han sido increíble (Bob Dylan, Adele, Noel Gallagher…) Así que no es de extrañar que Bélgica tenga alguno de los mejores festivales del mundo.
Hoy os voy a hablar de Rock Werchter y mi experiencia en este loco e inolvidable festival.
La mañana del 30 de junio partí dirección Lovaina. Werchter es un pequeño pueblo a escasos minutos de la ciudad flamenca y elegí ir en tren para allá. Una de los puntos positivos de este festival es que el billete de ida y vuelta al festival viene incluido en el precio de la entrada, por lo que irme de Bruselas y volver me salió gratis.
Una vez en Lovaina hay muchísimos carteles que indican bien dónde coger el bus: Para todos aquellos que no hablamos flamenco como yo no os preocupéis, hay indicaciones por todos lados y es imposible perderse.
El bus del festival nos deja a un kilómetro de la entrada, hay que caminar un poquito y con suerte no os va a llover como a mi. ¡Menos mal que me llevé un chubasquero! La próxima vez voy a tener que llevarme calzado adecuado, unos tenis no son suficientes para caminar por el suelo embarrado.
Al llegar cambiarán nuestro ticket impreso por una bonita pulsera. Y ahí ya sí que sí…¡Ya estamos en Rock Werchter!
Cuando yo llegué estaba diluviando, pero eso no fue un impedimento: Todo el público se movía al ritmo de Jake Bugg que nos deleitó con su marcado estilo folk. Había mucha gente y yo tenía un objetivo claro: Tenía que llegar a primera fila para el concierto de Paul McCartney.
La parte del público está puesta de tal manera que se divide en tres zonas, para pasar a cada zona hay una puerta, lo que asegura que no haya una afluencia incontrolable de personas.
Después de Jake Bugg y de un descanso de una hora era el turno del pop de Ellie Goulding. Un gran espectáculo y una multitud de personas con cientos de carteles esperando recibir la atención de la cantante. Imágenes en las pantallas, humo, baile y una voz dulce fue la combinación perfecta para un concierto espléndido.
Por suerte, dejó de llover y se quedó un día despejado, con el sol ya bajando y a breves minutos de mi concierto esperadísimo: Paul McCartney.
Después de un poco de retraso, el público estaba enardecido, y sin avisarlo allí apareció el ex-cantante de los Beatles, guitarra en mano y dispuesto a regalarnos el que será uno de los mejores conciertos de nuestra vida.
Alternando entre canciones antiguas y modernas, era imposible que no se nos escapase una lagrima. O dos. O muchas. La verdad es que lloré muchísimo de la emoción cuando tocó ‘Something’ con el ukelele, le dedicó ‘Here Today’ a John Lennon o cantó al unísono con nosotros ‘Hey Jude’. Paul McCartney resultó ser, a su vez, una persona simpatiquísima; Respondía al público, hacía bromas y nos contaba anécdotas de su larga trayectoria personal. Las dos horas se hicieron cortísimas, pero supongo que nunca es suficiente si nos lo estamos pasando bien.
Al terminar el concierto y dando paso a Disclosure, me dispuse a investigar un poco sobre el terreno del festival.
Para comer hay que comprar tickets, siendo 15 euros 5 tickets. Con ellos podremos comprar comida y bebida en los distintos puestos: Gofres, patatas, hamburguesas pero también muchas alternativas como comida tailandesa e italiana.
También teníamos zonas de descanso y chill-out, donde podemos tumbarnos un rato después de largas horas de pie.
A las dos de la mañana partí rumbo a Bruselas. Aunque había muchísima gente esperando los buses no paraban de venir, haciendo que las colas de disminuyeran con gran rapidez.
Y esta, amigos de Erasmus en Flandes, es mi última experiencia Erasmus. Considero que no hay mejor manera de terminar lo que ha sido el mejor año de mi vida. Toda la gente que he conocido, todos los lugares que he ido y especialmente Bruselas tendrán un lugar muy grande en mi corazón.
Muchísimas gracias a todos los que me habéis acompañado en esta gran aventura, espero veros pronto viendo la puesta de sol en Mont des Arts mientras nos tomamos un café.
Con mucho amor,
Guada.
Me llamo Guadalupe y aunque nací en Buenos Aires (Argentina) he estado viviendo la mayor parte de mi vida en España (Concretamente en Cataluña y Andalucía). Estudio Publicidad y RRPP y mi debilidad es la creación de contenido audiovisual, eso quiere decir que llevo mi cámara a todos los sitios y tengo una obsesión por documentar mi pequeño paso por la tierra.
Hace un año justo decidí echar la beca para venirme a estudiar en Bruselas y un año después me encuentro aquí, en el centro de la capital europea con miles de historias y experiencias que he vivido en mi primer semestre.
En resumen podría decir que mi primer semestre en Bruselas estuvo repletísimo de emociones; Al principio, me resultó un poco duro alejarme de todo aquello que conocía y había aprendido a querer en España, pero poco a poco Bruselas y su gente me enseñaron que esta ciudad tiene mil y un rincones que hacen que sea imposible aburrirse y hoy en día resulta imposible despegarme de este rincón de Europa al que puedo llamar con orgullo ‘hogar’.
1 comentarios
Gracias por la información!.