Es un momento un poco incómodo. Nos ofrecen un regalo porque cumplimos años, es la época, o simplemente porque nos rodeamos de gente buena y detallista que quiere darnos algo. Tenemos un paquetito envuelto delante de nosotros y lo cogemos para romper el envoltorio y ver en su interior; y es justo ahí cuando comienza el reto. Intentamos romper el papel pero parece que haya sido creado con fibras de chicle, y cuando por fin conseguimos arrancar algo, son trozos muy pequeñitos que no nos dejan ver lo que hay dentro. Pero de repente, sin ni siquiera darnos cuenta, conseguimos quitar un pedacito del papel de regalo que parecía indestructible, y logramos ver lo que hay en el interior.
Llevamos mucho tiempo desenvolviendo el regalo. Para ser exactos, desde octubre para las cafeterías, bares y restaurantes; y desde el 19 de noviembre para las instituciones culturales. Hemos estado quitando trocitos y trocitos de papel y parecía que no éramos capaces de ver qué escondía el envoltorio… hasta ahora. Y es que desde el pasado martes 1 de diciembre, Bruselas ha conseguido arrancar un buen pedazo y ver lo que escondían tantas capas de papel: el primer halo de luz al final del túnel.
Esto es así porque a partir de esta fecha y hasta el 15 de enero, los museos de Bruselas, las piscinas y las tiendas no esenciales vuelven a abrir sus puertas al público. No es el caso de los bares, restaurantes y cafeterías, que por seguridad continuarán cerrados. Eso sí, a pesar de que todas las tiendas sí abren a partir del 1 de diciembre, los museos de la ciudad van a ir abriendo paulatinamente.
Aquí os dejo un esquema con los museos que vuelven a abrir y las fechas en las que lo hacen:
Tenemos que admitir una cosa, y es que va a ser complicado vernos en otro sitio que no sea un museo durante este mes. Sobre todo porque, aunque por fin podemos ver a Magritte o volver a Halles Saint-Géry, las medidas sanitarias siguen estando muy presentes. Es por eso por lo que cada establecimiento e institución cultural se cercioran de la seguridad de todos los visitantes, controlando el uso obligatorio de la mascarilla, la distancia social, y ofreciendo solución hidroalcohólica para la higiene de manos.
Ya empezamos a poder ver el regalo; y una vez que hemos quitado un trozo grande del papel de rayas, el resto del envoltorio va solo. Sí, tenemos que seguir desenvolviendo, pero ya estamos a muy pocos tirones de empezar a montar el Scalextric que tanto habíamos pedido; y ¿qué mejor primer pedazo que el de volver a sentir la cultura en un museo?
¡Muy buen día, regaladores!
Me llamo Marina Carrasco Valero, estudio Periodismo y Comunicación Audiovisual, y este primer cuatrimestre voy a ser vuestra corresponsal Erasmus en Bruselas. Durante los próximos cinco meses, voy a ser la pequeña puerta que os lleve a tocar, paladear, ver (aunque con un poco de miopía), oler y oír Bruselas. Juntos vamos a descubrir sus secretos, exhibiciones, conciertos, festivales…