Hoy os vengo a hablar de música, pero no de la actual, sino de la clásica, de la que ha marcado historia. Y es que Flandes tiene muchos artistas conocidos, pero a veces se nos olvidan los orígenes y las raíces, es por eso que hoy vengo a desenterrar una vieja gloria de la que poso se ha hablado: Sor Sonrisa.
Inicios
Jeanne-Paule Marie Deckers, nació el 17 de octubre de 1933, fue una cantautora belga y miembro de la Orden de las Dominicas en Bélgica como Sor Luc Gabriel. Hija de un pastelero, fue educada en una escuela católica de Bruselas. Su madre la considera babastante masculina y se alegró cuando decidió ingresar en las Guides Catholiques de Belgique.
A los quince años tuvo la premonición de que sería monja. Mientras estudiaba tres años de bachillerato para obtener el título de profesora de escultura, se planteó dedicar su vida a la religión en un convento católico. A partir de los 21 años, enseñó escultura a jóvenes. En un campamento en 1959, conoce, a Annie Pécher, de dieciséis años, con la que entablará una estrecha relación. En septiembre ingresa en las Hermanas Dominicas Misioneras de Nuestra Señora de Fichermont, con sede en la ciudad de Waterloo, donde tomó el nombre religioso de Hermana Luc Gabriel.
Durante su estancia en el convento, Jeannine, cantó e interpretó casualmente sus propias canciones, que fueron tan bien recibidas por sus compañeras monjas y los visitantes. Sus superioras religiosas la animaron a grabar un álbum, que los visitantes y las personas que se retiraban al convento podrían adquirir.
Debut
En 1962, el álbum se grabó en Bruselas, el sencillo Dominique se convirtió en un éxito internacional, y su álbum vendió casi dos millones de copias. La hermana Luc Gabriel se convirtió en una celebridad internacional y adoptó el nombre artístico de Sor Sonrisa. Dio varios conciertos en directo y apareció en el programa de televisión The Ed Sullivan Show el 5 de enero de 1964. Fue la primera canción de un artista belga que alcanzó el número uno en Estados Unidos.
No obstante, a la hermana Luc Gabriel le resultaba difícil tener que estar a la altura de su publicidad. Como una auténtica girl scout, siempre tenía que estar alegre y de buen humor. Nunca se me permitía estar deprimida, recordaba en 1979. «La madre superiora solía censurar mis canciones y quitar los versos que escribía cuando me sentía triste».
En 1963, la General Music Company publicó un libro de 15 canciones suyas con letras en inglés proporcionadas por Noël Regney. Ese mismo año fue enviada por su orden a seguir cursos de teología en la Universidad de Lovaina. Le gustó la vida estudiantil, aunque no los cursos.
Deckers no obtuvo mucho dinero de su fama internacional, y su segundo álbum: Her Joys, Her Songs, recibió poca atención y desapareció casi tan pronto como se publicó en 1964. La mayor parte de sus ganancias se las llevaron Philips y su productor, mientras que el resto fue a parar automáticamente a su congregación religiosa, que obtuvo al menos 100.000 dólares en concepto de derechos de autor.
Abandono
Dividida entre dos mundos y cada vez más en desacuerdo con la Iglesia católica, Sor Sonrisa abandonó el convento en 1966 para dedicarse a la vida de laica dominica. Más tarde declaró que su marcha se debió a un choque de personalidades con sus superiores. Había sido obligada a abandonar el convento y que no lo había hecho por voluntad propia. Las superioras del convento negaron a las demás monjas el contacto con ella por considerarla una «mala influencia».
Sin embargo, tras su marcha, siguió respetando al máximo la disciplina del convento, considerándose monja, rezando varias veces al día y manteniendo un estilo de vida sencillo y casto.
En definitiva, su historia, si bien no fue una larga y duradera, salto a la fama llevando la música belga a un panorama más internacional. Es por eso que se le debe dar su reconocimiento y relevancia. Desde aquí os animo a escuchar su sencillo debut que puede ser que os levante una sonrisa ni que sea. También tenéis la opción de descubrir música nueva como os propongo en esta otra publicación. Gracias, nos leemos.
Albert Ruiz
Me llamo Albert Ruiz Viñas y soy de un pueblo a las afueras de Barcelona, Sant Esteve Sesrovires, quizá a algunos os sonará por ser el sitio donde creció y vivió Rosalía, una de las cantantes españolas con más proyección internacional actualmente.
Tengo 22 años y estoy en el cuarto año de carrera, estudio Comunicación Audiovisual en la Universidad Autónoma de Barcelona, de ahí mi afán por el tema sobre el que os hablaré. Si bien mi carrera es muy abierta y polivalente, uno de los pilares que la sustenta es la radio y, por ende: la música.
En mi caso os escribo desde Leuven, que por quien no lo sepa, es una pequeña ciudad estudiantil al lado de Bruselas. Estos primeros días han sido bastante frenéticos, no nos vamos a mentir, pero tengo que decir que la sensación de poder vivir esta experiencia Erasmus te llena de energía para afrontar cualquier reto. Durante el curso estaré estudiando comunicación en la KU Leuven, aunque seguramente acabe haciendo asignaturas un poco más alejadas de mi área de estudio, creo me ayudarán a crecer en el ámbito educativo.