Sin ser una de las construcciones que ha sobrevivido al paso del tiempo en Amberes, y situado en el centro neurálgico de la ciudad, cerca de la calle comercial Meir, yace el parque municipal de Amberes, o Stadspark.
Me refiero a que no ha sobrevivido, ya que antiguamente era una de las fortalezas que protegía a la ciudad, y se llamaba: Fort Herentals. Este formaba parte de las murallas españolas, y con la construcción de Brialmontomwalling desde 1859, fue demolida. En 1867 se construyó en el mismo lugar un parque de estilo paisajista inglés, que fue diseñado por Eduard Keilig.
Durante la Segunda Guerra Mundial, el parque volvió a asumir una función militar: aquí se ubicó la sede de la Abschnitt Antwerp, parte del Muro Atlantik. Los tres búnkeres del parque son un remanente de esto. El 4 de septiembre de 1944, los británicos dominaron los búnkeres alemanes.
En la actualidad, es un precioso parque que, bastante grande y con forma triangular, ocupa gran atención de la ciudad en el centro de ella. Un lago que recorre medio parque aporta un paisaje muy bonito, acompañado de diversidad de flora y arboles ciertamente curiosos. Desde el puente que nos permite cruzar el lago se pueden disfrutar de muy buenas vistas del mismo.
También, hay una cafetería con muy buena fama al lado de un parque de skate y otro más orientado a los niños. Así pues, el atractivo de parque llega a familias, jóvenes y atrevidos.
Esto es todo por hoy, recomendando que si pasáis por Amberes, como mínimo un paseo por este parque os deis.