¿¡Preparados para conocer la última aventura del reportero Tintín!? ¡Vamos que nos vamos!
La estación de trenes de Schaerbeek alberga el museo Train World, en 2 partes: la antigua estación de Schaerbeek y el museo nuevo, en el que vamos a poder encontrar una cantidad inmensa de máquinas y objetos ferroviarios, muchos de los cuales ya han quedado para la historia de este medio de transporte, tan complejo como espectacular. Pero cuando visites Train World no solo te toparás físicamente con antiguas locomotoras y elementos indispensables para el funcionamiento normal de la red de trenes belga, sino que ante tus ojos se presentarán fotografías, vídeos y un asombroso material interactivo, los cuales te ayudarán tanto a entender mejor la evolución histórica de las redes ferroviarias como a…¡simular la conducción de una locomotora por ti mismo! Mejor puesta en escena, imposible.
¡Y NO SE QUEDA AQUÍ LA COSA! Porque entre las majestuosas locomotoras belgas se ha colado, al igual que en muchas de sus aventuras, el que probablemente sea el bruselense más famoso: hablo de…TINTÍN (y sus compañeros de viaje, como el fiel Milú o el capitán Haddock). El cariño de su creador, Hergé, por los trenes es notable, incluso sabemos que el propio Hergé trabajó para la SNCB (Societé Nacionale de Chemins de fer Belges), en la ilustración de un folleto de esta empresa pública. “Tintín en el Congo”, “Tintín en el país de los soviets”, “El loto azul”…son cómics en los que las aventuras del periodista se entremezclan con viajes, encuentros y accidentes en los que Tintín siempre es el protagonista.
El tributo de Train World a Tintín (que durará hasta el 16 de abril de 2017) se puede ver desde el inicio de la visita: la antigua estación de Schaerbeek, de 1920, es la estación de trenes más antigua conservada en Bélgica, y por ella pasaba la primera línea ferroviaria del continente europeo. Probablemente el “Express International” Bruxelles-Moscú que aparece en un libro de Tintín también pasaría por esta bella estación en la que podemos ver también como el estilo “Art Nouveau” está presente en ella.
Antes de pasar al nuevo edificio, te encontrarás, junto a las vías del tren, una locomotora grúa con la que merece la pena pararse un rato. ¡ATENCIÓN! Porque a partir de ahora te sumergirás en el mundo de los trenes de una forma inédita. Tintín te acompañará…¡adelante!
Un 5 de mayo de 1835 comienza a rodar por primera vez un tren en Bélgica. La historia de los trenes, no obstante, comienza en Reino Unido y es de ahí de donde se importan las primeras locomotoras. Un dato curioso a mencionar es que la conducción de estos primeros trenes se hacía desde la parte izquierda de sus locomotoras, como podemos ver en la foto. Bélgica siguió conservando esto, no así otros países, como Holanda. Es muy interesante alquilar una audioguía al principio de la visita, ya que te irá contando numerosos datos clave sobre todos los elementos de la misma, como lo que os acabo de contar. En la primera sala disfrutarás de la compañía de locomotoras de vapor, como la “Pays de Waes”, la más antigua conservada en Bélgica. El tren se convierte en el motor de la Revolución Industrial.
Si sigues avanzando, en una segunda sala aprenderás también más sobre la construcción y la forma de los raíles mediante paneles y un pequeño juego en el que compararás las resistencias entre los raíles y las ruedas. ¿Cuál es la mejor combinación de materiales? ¡Comprueba tú mismo por qué! Seguidamente, entenderás cómo el mundo de los trenes armonizó a partir de principios del XIX el horario en Bélgica: en los dos puntos más lejanos comenzaba a ser exactamente la misma hora en los relojes presentes…¡gracias a la necesidad de puntualidad de los trenes! Y el reloj “madre” se encontraba en las estaciones de Bruselas… Fascinante, ¿verdad?
Si eres lector de Tintín, en el pasillo entre las salas 2 y 3 del nuevo edificio reconocerás el nombre de prácticamente la única estación que aparece en los libros de este aventurero: Moulinsart. Este es el pueblo en el que el capitán Haddock vive en su castillo desde el cómic “El tesoro de Rackham el Rojo”. Sin embargo,
como he dicho más arriba, los trenes son una constante en los viajes de Tintín. Para la época de Tintín, ya existían los trenes tipo diesel como el “Type 12 Atlantic”, un “avión sobre raíl”, que alcanzaba una velocidad máxima de 165 Km/h. En esta tercera sala, que personalmente me fascinó, recordarás las diferencias y la transición histórica entre los trenes de tracción a vapor, diesel y eléctricos (que empezaron a usarse a partir de 1935 y con ello la adaptación de las vías). Los trenes se modernizan en sus motores y también en su aerodinámica y en sus interiores (ej.: puertas eléctricas, hacia mediados del siglo XX). Un apartado sobre la importancia de los trenes en la I y II Guerras Mundiales (las vías de tren belgas fueron un lugar estratégico) te pondrá la piel de gallina: trenes para transporte de deportados… Igualmente, podrás visitar, sin necesidad de tocar a la puerta, la casa de un ferroviario, sentarte en su salón, leer sus periódicos…¡genial!
En la recta final de la visita, encontrarás trenes algo más recientes y para usos variados, como los vagones de la Cruz Roja, los trenes de correo postal (usados hasta 2003), o los vagones para la Realeza. Tintín y su creador te esperará en algunos de estos trenes y en otros sitios de la sala. Antes de irte, el protagonista serás tú: no te irás sin antes probar tú mismo la conducción de un tren e imaginar cómo será este maravilloso mundo de los trenes en un futuro.
¿CÓMO PUEDO LLEGAR HASTA TRAIN WORLD? El museo se encuentra en place Princesse Elisabeth, a la que puedes llegar con el transporte público: líneas 7 (Princ. Elisabeth), 92, 59 y 69 (gare de Schaerbeek), aunque la línea 3 te deja a unos 10-15 minutos de la estación (Van Praet, dirección Esplanade).
HORARIO: martes a domingo de 10 a 17h (última entrada a las 15:30). PRECIOS: niños hasta 6 años – gratis; entre 26 y 65 años, 10€; menores de 26 años y mayores de 65: 7,5€. La audioguía vale 2€, pero también podrás, previa reserva, solicitar visitas guiadas (3 semanas antes de la visita): 20 pers. máximo/110€ + entrada. También quizá te interesará saber que Train World organiza diversos eventos, como cenas. Más información en http://www.trainworld.be/fr . ¡Descarga también la app Train World para tu visita!
Ahora solo queda que tú mismo compruebes in situ la relación entre el mundo de los trenes y Tintín… ¿¡A qué esperáis!? ¡Pasadlo genial!
*Gracias a © Hergé-Moulinsart 2017 (imágenes Tintín)