Si habéis seguido los últimos posts de mis aventuras por Malinas ya sabréis que la pequeña ciudad flamenca me enamoró. ¡Prueba de ello es la ingente cantidad de fotos que hice ese día!
Como no quiero que se me quede nada en el tintero, aquí vamos con una nueva entrega: los reflejos de Malinas, en 12 fotografías que parecen hechas en un mundo paralelo.
Cuando estaba seleccionando las fotos para este post me di cuenta de algo que me sorprendió: en casi todas aparecía algún tipo de reflejo. Ya fuera en el canal, en el suelo de la calle mojado por la lluvia, en cristales mostrando los edificios de enfrente, en suelos con baldosas relucientes, las luces de farolas o coches… Siempre hay algo más allá de lo que parece a simple vista, y si volvéis a las fotos de los posts anteriores os daréis cuenta.
Espero que disfrutéis con esta visión diferente de Malinas; una ciudad del revés.
Este es el cuarto post que hago sobre Malinas, y todo tras una visita de un día. Ni siquiera, en realidad fueron unas 7 horas. ¿Os imagináis si me hubiera quedado un día más? En este post de mi compañero Manuel aparecen unas cuantas cosas que a mí me quedaron por ver, ¡pasaros por allí también!