Para los que venís y vendréis a Bruselas de Erasmus, sabréis que encontrar alojamiento es una tarea cuanto menos, engorrosa. No es difícil, ya que existe gran variedad, pero hay que saber dónde buscar para tener éxito. Además, otros factores como el tiempo de vuestra estancia van a condicionar mucho este proceso. No todas las residencias y pisos aceptan a estudiantes por menos de un año de contrato… Hoy, os hablaré en concreto del lugar que yo elegí para mi primer cuatrimestre en Bruselas: la residencia Studeopolis.
El edificio
Se trata de un edificio bastante nuevo situado en el centro-norte de Bruselas (Avenue de l’Héliport), no muy lejos del canal. Comparte la manzana con viviendas del mismo aspecto, pero que no forman parte de la residencia: aquí viven vecinos. Las ventanas del lado interior están enfrentadas con sus balcones, y dan al patio interior común. Esta zona es bastante acogedora, pero en invierno tiene poco uso. A la residencia se accede mediante un sistema de doble puerta que refuerza la seguridad. Normalmente la de fuera queda abierta, excepto por la noche, y la de dentro se desbloquea con el llavero.
Tiene dos accesos, la puerta 42 y la 46, y es que la residencia no está conectada por dentro. Si venís con amigos y queréis visitaros a menudo, tened en cuenta escoger las habitaciones en el mismo bloque. Si no lo hacéis, tampoco pasa nada grave, solo que tendréis que cruzar por la calle o el garaje. Los pasillos están divididos en A, B y C, siendo A y C los accesos directos desde los ascensores, y B la sección de en medio. Estas secciones las separan puertas que solo se abren con las llaves de la habitación. Cada una de ellas tiene alrededor de 10 habitaciones y una cocina para compartir. Aunque es relativamente grande, hemos comprobado que a veces los 4 fuegos resultan escasos si todos decidís cocinar a la vez, aunque no suele ser el caso.
Las habitaciones
Como dato curioso, cada planta tiene adjudicado un color (bastante llamativo), que recomiendo que tengáis en cuenta para elegir. Lo vais a ver muy a menudo, y aunque el azul oscuro de la planta 2 se lleva bastante bien, el rojo de la planta 3 o el naranja en la 5 pueden resultar cargantes.
Aun así, las habitaciones por dentro son blancas, con muebles blancos y una mesa oscura. Tendréis también una pequeña nevera y un baño propio, lo que es de agradecer. Las habitaciones son bastante grandes, por lo que tendréis espacio suficiente para vuestras cosas. Existen opciones de habitaciones con cocina integrada, y algunas que comparten baño, con precios acordes. Valorad esto si queréis alojaros aquí, ya que el alquiler no es barato, ronda los 550€ al mes, y no incluye gastos ilimitados en agua, luz etc. En el séptimo piso, hay estudios privados para 2 personas, consecuentemente más caros, aunque ya vienen equipados y os ahorraréis la visita a Ikea.
A la hora de elegir, os recomiendo una habitación algo apartada de la cocina para evitar ruidos y olores, y que dé al lado exterior. Aunque se escuchan los coches que pasan, entra mucha más luz y las vistas son mejores.
Las zonas comunes
Para mí, lo mejor de vivir aquí son las zonas comunes: además de las cocinas, se valora mucho la sala de estudio; la sala de juegos con sillones y billar (aunque de noche esté cerrada) y el pequeño gimnasio, que está equipado con lo justo, pero es muy útil.
Además, aunque la residencia ha cambiado de dueños y van a modificar algunas cosas, siempre tendréis a Sonia, la conserje. Ella es sin duda la que más ayuda actualmente a los estudiantes a solucionar los pequeños problemas de mantenimiento que van surgiendo, puesto que vive ahí y conoce a todos.
Por último, aunque es algo que no se considera tanto hasta que no vives allí, es importante saber que las basuras están en un cuartito en el -1, y la lavandería en el -2. Si ponéis una lavadora y secadora a la semana, os costará 5€ la colada completa. Recordad tener el dinero en monedas y en el importa exacto, ya que las máquinas no aceptan billetes ni dan cambio.
Transporte público
Tiene el parque Maximilien enfrente, desde donde se coge el autobús 46 al centro. Varias líneas de bus parten también desde el otro lado del bloque hacia otros puntos de la ciudad. Además, la estación del Norte no está nada lejos, llegas en unos 7 minutos dependiendo de tu ritmo: de allí, aparte de trenes hacia otras ciudades belgas, salen las líneas 3, 4, 25 y 55 de tranvía. Delante de la estación también tiene su parada oficial Flixbus, por lo que la ubicación de la residencia acaba siendo muy conveniente para quienes quieren viajar y moverse.
El metro está algo más alejado, aunque en menos de 10 minutos en línea recta está la parada de Yser, por la que transitan las líneas 2 y 6. Aunque no esté tan cerca como el bus, según el trayecto vale la pena, ya que el metro de Bruselas viaja a gran velocidad.
Para universidades como la Université Saint-Louis, la KU Leuven, o la Erasmushogeschool Brussels, la ubicación es bastante conveniente. Para los campus de la ULB o VUB, desde luego vale la pena buscar alojamiento más al sur de la ciudad para tardar menos en llegar.
El barrio: ambiente y servicios
Eso sí, debéis tener en cuenta que el barrio en sí no está muy animado. Es una zona de negocios, más que un barrio de vecinos, y aunque al norte (en Schaerbeek) y al sur (hacia el centro de la ciudad) encontraréis más tiendas, escasean los bares en la zona.
En cuanto a los supermercados, Brussels Market está muy bien abastecido y a pocos minutos andando. Los precios no son abusivos, tiene una carnicería como tal, comidas para llevar, un pasillo solo de tés, objetos para el hogar, un apartado con muchísimas frutas y verduras al aire libre…
En un rango de 10 minutos andando tenéis también un Lidl, un Proxy y varios Carrefour Express, además de varias “corner shops” donde venden sobre todo fruta y alcohol.
En conjunto, mi recomendación personal es que vengáis aquí si buscáis una zona tranquila y una residencia nueva con instalaciones modernas, pero recordad que cuando queráis más movimiento tendréis que desplazaros. Por suerte, Bruselas está bien comunicada, y en unos 10 minutos en transporte público ya estaréis en el centro turístico de la capital.
¡Mucha suerte en la búsqueda, y nos leemos pronto!
Me presento, me llamo Julio Yustas, tengo 23 años y voy a ser parte del equipo de corresponsales que, durante el próximo semestre, va a intentar que disfrutéis de Flandes al menos tanto como nosotros.
Vengo de Valencia, donde estudio el Máster de Ingeniería Industrial en la Universitat Politècnica de València. Durante los dos próximos años, disfrutaré de Bruselas gracias a un acuerdo de doble titulación por el que estudiaré el Máster en Ingeniería Electromecánica en la Université Libre de Bruxelles (ULB).
Me considero una persona bastante proactiva y es difícil que no me encontréis embarcado en alguno de mis múltiples proyectos. Mi tiempo libre lo dedico principalmente a pasar tiempo con mis amigos, viajar, la fotografía y la cocina.
1 comentarios
Hola: Gracias por tu mensaje. Ahora mismo no hay ningún corresponsal del blog en esa residencia por lo cual recomendamos ponerte en contacto directo con la residencia o tu universidad. Sobre el barrio el estudiante del artículo escribió lo siguiente:
«El barrio: ambiente y servicios
Eso sí, debéis tener en cuenta que el barrio en sí no está muy animado. Es una zona de negocios, más que un barrio de vecinos, y aunque al norte (en Schaerbeek) y al sur (hacia el centro de la ciudad) encontraréis más tiendas, escasean los bares en la zona.
En cuanto a los supermercados, Brussels Market está muy bien abastecido y a pocos minutos andando. Los precios no son abusivos, tiene una carnicería como tal, comidas para llevar, un pasillo solo de tés, objetos para el hogar, un apartado con muchísimas frutas y verduras al aire libre…
En un rango de 10 minutos andando tenéis también un Lidl, un Proxy y varios Carrefour Express, además de varias “corner shops” donde venden sobre todo fruta y alcohol.
En conjunto, mi recomendación personal es que vengáis aquí si buscáis una zona tranquila y una residencia nueva con instalaciones modernas, pero recordad que cuando queráis más movimiento tendréis que desplazaros. Por suerte, Bruselas está bien comunicada, y en unos 10 minutos en transporte público ya estaréis en el centro turístico de la capital.»
¡Suerte y saludos!