¿Con ganas de ver el mar?
Ostende es famosa en Bélgica por sus playas. Es el lugar predilecto de los belgas para disfrutar de un buen día de playa y de windsurf. La ciudad es pequeña y con un día es suficiente para visitarla. Podéis gozar de su largo paseo marítimo, y por supuesto, de sus playas. No estamos en verano, ¿Pero quién no disfruta de un buen paseo al lado del mar?
A parte de la visita imprescindible a la Catedral de San Pedro de estilo neogótico, os invito a conocer sus parques: el de Leopoldpark y el Jardín japonés, en Koningspark.
También se encuentra el Fuerte de Napoleón Buenaparte, una fortaleza construida en 1810. Posteriormente fue ocupada por los alemanes en la primera y segunda guerra mundial. Actualmente es un museo sobre su historia. El precio es de 5 euros.