Lovaina es la típica ciudad para visitar en un día, como muchas otras de Flandes. El hecho de que esté tan cerca de Bruselas permite poder estar mucho tiempo viendo la ciudad, aunque también es cierto que se pueden invertir más días. De todos modos, en este post os recomendaré qué ver, lo más imprescindible, y también qué otras cosas hacer.
¿Qué ver?
Una visita a Lovaina no sería tal si pasáramos por alto el antiguo Ayuntamiento y la iglesia de San Pedro, en Grote Markt. Ambas cosas son lo primero que viene a la mente al pensar en Lovaina. También conviene ir hacia Monseigneur Ladeuzeplein, pasando por delante del M-Museum del que destaca su arquitectura contemporánea, hasta llegar a la Biblioteca Central. Si el día acompaña, es muy interesante entrar y subir a la torre para poder admirar Lovaina desde las alturas. Después una buena idea sería ir hacia Oude Markt, el bar más largo del mundo, donde tomar una cerveza es algo casi obligado.
Los siguientes puntos turísticos que sin duda yo destacaría son el Gran Beaterio, para pasear tranquilamente, los distintos parques urbanos como son Sint-Donatuspark o el del Dijle (cerca del Gran Beaterio). Y si por un casual barajáis la posibilidad de alquilar bicicleta, lo cual recomiendo bastante, se puede ir al Castillo de Arenberg y descubrir los bosques de fuera del anillo.
Como dije en un post hace poco, el Jardín Botánico también merece una visita, ya que es el más antiguo de todo Bélgica y es muy agradable.
¿Dónde comer?
Qué de quebraderos de cabeza nos trae esta pregunta a veces… Os voy a proponer varias opciones. En primer lugar, la calle Muntstraat, llena de restaurantes. Quizás no sean los más baratos de Lovaina, pero son muy buenos. Para la gente que se quiera gastar un poquito menos, hay varias opciones, desde el tailandés en Tiensestraat hasta varios Coup the soup en todo Lovaina, o incluso Domus, para los que quieran probar comida tradicional y buena cerveza.
A la hora de tomar un café, recomiendo Anna’s Special Bar, Swartehond, Koffie Onan, Noir Coffeebar, etc. Hay millones de opciones, ¡y yo sinceramente no me podría quedar con una!
Y dicho todo esto, recomiendo ir fijándose en las distintas estatuas de la ciudad, las cuales no dejan indiferente a nadie por lo curiosas y variopintas que son!
Soy Marina, la nueva corresponsal Erasmus en Lovaina. Estudio arquitectura en la Universidad Politécnica de Madrid y cursaré cuarto en la KU Leuven. Hace apenas unos días que he llegado a la que será mi nueva casa durante este curso, y todavía no me lo creo. Tengo la sensación de que he venido aquí de viaje y que en unos días me toca volver a Madrid. ¡Pero no! Ahora empieza la aventura de acomodarse a esta nueva ciudad la cual seguro me sorprenderá a lo largo del año. Elegí Lovaina por varias razones, entre ellas el prestigio de su universidad y evidentemente su ambiente universitario.
Todo estudiante quiere ir a un sitio donde además de estudiar también lo vaya a pasar bien, las cosas como son. Además considero que Lovaina, y todo Bélgica, tiene una amplia oferta cultural que hará que cada día aprenda algo nuevo. Poco a poco iréis descubriendo conmigo cosas interesantes y útiles de esta ciudad, aparte de daros consejos a los futuros Erasmus. De momento todo lo que os puedo decir es que traigáis chubasquero y ¡muchas ganas de disfrutar!
