¿Quien son esas señoras que piden dinero antes de entrar al baño de muchos establecimientos?Te has dado cuenta, ¿verdad?
Bruselas es la única ciudad del mundo en la que los turistas se concentran en masa para ver la estatua de un niño haciendo pis….Qué contradictorio ¿No? Porque la ciudad está llena de servicios y “toilettes” públicos incluso en plenas plazas, como es el caso del barrio de Annessens, para evitar que la gente lo haga en cualquier esquina.
La primera vez que vi a una mujer pedirme dinero antes de entrar al servicio me chocó un poco, no sabía si me estaba engañando, o si de verdad limpiaba los servicios(era bastante mayor). Estuve 5 minutos buscando en la mochila (sólo llevaba un billete de 20€ y era urgente) y tras armar una gran cola de varios minutos, al fin encontré la moneda (estas veces que sabes seguro que las llevas…). La señora me lo agradeció mucho y la verdad es que en mi caso mereció la pena, estaban perfectos y sólo olía al ambientador que ponen en la taza del váter.
A estas señoras se les suele llamar Madame pipi debido a que son las encargadas de tener los servicios limpios, en buenas condiciones y listos para su uso. Y digo señoras porque aún no me he encontrado a ningún joven mozo, pero seguro que hay alguien que rompe la norma. Normalmente tienen un stand en la puerta de los baños que te impide pasar, a no ser que les des sus merecidos 0,30/0,20 céntimos que previamente han indicado escrito en un pequeño cartel en su mesa. Se encuentran principalmente en los baños de las estaciones de tren, en los cines, en muchos cafés y restaurantes y son conocidas en toda bélgica por el nombre de toiletjuffrouw.
En otras ciudades, puede ser que también pidan dinero para entrar al servicio, pero no encontrarás una madame pipi tan fácilmente. Además casi todas pagan de su bolsillo los productos y papel que utilizan, se merecen su recompensa ¿no?
Soy Mayte Hervás y seré la nueva corresponsal Erasmus durante los próximos 5 meses en la ciudad de Bruselas. Lo cierto es que tengo muchas ganas de empezar esta nueva etapa en el blog, en el que podréis echar un vistazo a mi forma de ver la vida belga con alegría y humor, aunque también seré seria cuando tenga que serlo.
Curiosear por el extranjero es una gran virtud que se instaló en mí desde muy pequeña y por ello he esperado tres largos años de mi carrera de traducción para poder conseguirlo. ¡Me voy a Bruselas, y encima corresponsal!
Bruselas siempre ha captado mi atención, no solo por ser el centro neurálgico de Europa, sino por las diferencias culturales que existen entre la capital de Bélgica y España. Toda mi vida he vivido en una pequeña ciudad de Albacete (Hellín) y desde que me fui a estudiar he estado viviendo en Alicante; ambas ciudades completamente opuestas a la capital grande y europea que me va a acoger este año.La cantidad de eventos musicales que oferta Bélgica, que va desde pequeñas salas con música en directo hasta festivales, ¡me tiene impaciente por llegar!